viernes, 12 de diciembre de 2008


Duele demasiado el corazón cuando lo que mas queremos se va escapando de nuestras manos;
duelen demasiado las lagrimas cuando reflejadas ante el espejo demuestran la debilidad del ser;
Duelen demasiado las palabras cuando frente a ellas no hay soluciones ni nuevos interrogantes;
Duele demasiado existir cuando los sueños parecen no llenar las marcas del destino;
Duele demasiado ser una misma cuando tocamos lo mas bello y al instante lo convertimos en historia;
Duele...
Duele seguir cuando se han perdido las ultimas fuerzas.
Me duele todo esto de ser siempre yo....
17 de octubre de 2008